Piden 9 años de cárcel para el acusado de intentar acabar con la vida de su pareja estrangulándola
La Audiencia Provincial de León juzgará el próximo 19 de marzo a un hombre acusado de intentar acabar con la vida de su pareja estrangulándola en su domicilio de Ponferrada. La Fiscalía solicita para él una pena de 9 años de prisión por considerarle autor de un delito de homicidio en grado de tentativa con el agravado de parentesco.
Según las calificaciones provisionales de la Fiscalía, los hechos se remontan al 29 de abril de 2016 cuando el acusado se encontraba en el domicilio de su pareja, en Ponferrada, y se produjo una discusión entre ambos, motivada por los celos.
Tras la discusión, el procesado rompió el palo de una fregona con sus manos y trató de tirarse por la ventana, pero se lo impidió la víctima. A continuación, y según el relato del Ministerio Público, cogió dos cuchillos en la cocina mientras perseguía a su por entonces pareja por la casa para que viera cómo se cortaba las venas.
La mujer le pedía que abandonara el domicilio y la dejara en paz, a lo que él no accedió. Cuando parecía que él se había tranquilizado, el procesado aprovechó para agarrar a su pareja por el cuello y, con ánimo de acabar con su vida, empezó a apretarla con fuerza mientras ella luchaba por quitárselo de encima.
Ella intentó zafarse tirándose al suelo, pero el acusado seguía agarrándola el cuello con tal intensidad que incluso la mujer perdió el conocimiento y empezó a convulsionar. Mientras estuvo inconsciente, el procesado no realizó ninguna maniobra de reanimación ni solicitó asistencia sanitaria, añade el mismo auto.
Pasados unos minutos, la mujer recobró el conocimiento y el procesado la levantó del suelo y la colocó en la cama mientras le decía que: “tenía que terminar lo que había empezado porque le iba a buscar la ruina”. Ella aprovechó para escapar en un momento que el procesado salió de casa, aunque éste la persiguió hasta que la víctima pudo entrar en un bar cercano y pedir ayuda.
La mujer sufrió lesiones por asfixia, hematomas, hemorragias y daños cervicales. Tardó 90 días en curar, tres de ellos hospitalizada y 63 impeditivos. Como secuelas padece algia postraumática y trastorno por estrés postraumático.
La Fiscalía califica estos hechos como un delito de homicidio en grado de tentativa con el agravante de parentesco por lo que solicita para el procesado una pena de nueve años de prisión, además de una indemnización a la víctima de 10.000 euros por las lesiones y las secuelas sufridas.
La defensa lo niega
La defensa del procesado se muestra disconforme con el relato efectuado por el Ministerio Público por lo que pide la absolución de patrocinado. Así, afirma que cuando llegó al domicilio de su pareja había otro hombre y que cuando éste se fue comenzó la discusión. No obstante, que es ella quien impide al procesado abandonar el domicilio.
En cuanto a las lesiones de la mujer, las justifica alegando que ésta tropieza con la cama, se cae y se golpea la cabeza. Además, añade que cuando vuelve en sí él le insiste en que vayan a Urgencias, pero que la mujer se niega. Por todo ello, la defensa reclama la libre absolución.
