Felipe VI entrega despachos en la Academia Básica del Aire de La Virgen del Camino
Felipe VI presidió hoy por decimoquinta ocasión la entrega de Reales Despachos de sargento a los XXX integrantes de la XXVI Promoción de la Academia Básica del Aire de La Virgen del Camino, a quienes deseó “mucho éxito, muchas alegrías en vuestra carrera, que iniciáis hoy con paso honroso, como dice el lema de la Academia”.
El rey, quien recordó su habitual presencia en esta ceremonia, señaló que siempre es “un día especial” el que le permite ser testigo del inicio de una nueva generación de sargentos y del final de la etapa formativa en un centro en el que adquirieron la formación necesaria para “mejor servir a España”.
Don Felipe, que se desplazó en un avión del Ejército del Aire, llegó puntualmente a la plaza de armas de la Academia, donde se encontraban todas las autoridades, entre ellas, el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera. No acudió al acto la ministra de Defensa, Margarita Robles.
Después de pasar revista al Escuadrón de Alumnos y tras una breve intervención del arzobispo castrense, monseñor Juan del Río Martín, don Felipe entregó personalmente el despacho al número 1 de la promoción, Luis Ángel Posse García.
A continuación se dio lectura a la última lección del curso impartida por el coronel director de la Academia, José Antonio Gutiérrez Sevilla, quien se dirigió a los nuevos sargentos para instarles a entregarse a su nueva tarea “con pasión, con integridad y, sobre todo, con humildad, porque mandar es ante todo servir, sin esperar nada a cambio, más allá de la íntima satisfacción del deber cumplido; servir hasta entregar la vida, si fuera preciso, por España”.
Además, recordó que la academia amplía el próximo curso su currículo académico con dos nuevas titulacioes de técnico superior: la de Mantenimiento de Aviónica y la Administración y Finanzas. Dos incorporaciones, dijo, que con el aumento de un 30 por ciento en el número de alumnos, suponen “un reto para el próximo curso que afrontamos con la máxima ilusión y responsabilidad”.
Como colofón al tradicional homenaje a los que dieron su vida por España tuvo lugar una pasada de aviones del Grupo de Escuelas de Matacán (Salamanca) y una descarga de fusilería. Para poner el punto final a la solemne ceremonia, el rey ordenó romper filas a los nuevos sargentos “por última vez en esta Academia” antes del tradicional lanzamiento de gorras.
A continuación, tuvo lugar una exhibición aérea y un desfile militar y concluido el acto oficial castrense, las autoridades civiles y militares, entre las que se encontraban la presidenta de la Cortes de Castilla y León, Silvia Clemente, la delegada del Gobierno, Virginia Barcones, el subsecretario de Defensa, Alejo de la Torre de la Calle y el general Jefe del Estado Mayor del Ejército, Javier Salto Martínez-Avial, compartieron un ágape servido en el hangar de la Academia.,
El rey se dirigió a los alumnos y a sus familias y concluyó su intervención con un brindis brindis “por los sargentos, por el Ejército del Aire y por España”. Como hace habitualmente, saludó antes de despedirse a los militares y a sus familias durante un recorrido por el recinto, que abandonó sin cumplir esta vez la tradición de fotografiarse junto a los representantes de los medios de comunicación presentes.
Cita habitual
La Casa Real no estuvo presente el pasado verano en la entrega de los Reales Despachos en la Academia Básica del Aire de León, aunque Felipe VI sí presidió días antes -el 12 de junio- el cierre de los actos conmemorativos del 25 aniversario del centro. En 2016, el monarca sí asistió y en 2015 tampoco pudo hacerlo por coincidir la ceremonia con una visita del presidente de Perú, Ollanta Humala y su esposa, Nadine Heredia, a España. Las otras dos únicas ausencias a la entrega de Despacho Reales tuvieron lugaren 1997 como consecuencia del asesinato de Miguel Ángel Blanco y en el año 2012, debido a una de las operaciones de cadera de don Juan Carlos.
