Cruz Roja constata un nuevo perfil de exclusión en Castilla y León: el trabajador pobre

Banco de Alimentos de León

Cruz Roja ha constatado un nuevo perfil de exclusión social en Castilla y León: el trabajador pobre. Una persona que cobra un sueldo inferior a 600 euros que le impide mantener una familia y pagar un alquiler, una hipoteca y las facturas del agua, gas y luz. “Viene menos gente a solicitar ayuda a Cruz Roja pero la cronificación de la pobreza impide a muchos colectivos salir de la exclusión”, sentenció hoy el delegado especial de la entidad en Valladolid, José Ignacio de Luis durante la presentación de la memoria anual.

La organización atendió el año pasado a un total de 67.999 personas en la provincia de Valladolid, lo que suponen 10.000 menos que en 2014, pero la particularidad es que esos individuos recibieron ayuda en más ocasiones. De ellas, unas 29.000 están en situación de extrema vulnerabilidad, por lo que requieren de un seguimiento especial y que a la postre se traduce en las 49.500 intervenciones. Un número elevado de actuaciones que está relacionado con el trabajo transversal con estos colectivos para lograr una plena integración social y laboral. “No solo damos ayuda puntual sino que apostamos por la formación para que puedan encontrar un empleo”, recordó.

De ahí la importancia del Plan de Empleo de Cruz Roja Valladolid que el año pasado contó con 1.757 participantes y que permitió un total de 365 inserciones en empresas. El responsable de la organización agradeció el apoyo de las 247 compañías que colaboran con la ONG y que contratan a sus usuarios. “Las empresas confían en la formación de Cruz Roja y eso se traduce en el grado de inserción que ronda el 39 por ciento”, añadió.

De Luis destacó, según declaraciones recogidas por la Agencia Ical, el cambio de la pirámide de los usuarios de Cruz Roja puesto que hace ocho años la base estaba ocupada por inmigrantes y en la cúspide había algunos nacionales. Esa estructura ha experimentado un vuelco puesto que aseguró que ahora la base está formada, en su mayoría, por españoles. También recordó que alrededor del 30 por ciento de los inmigrantes que llegó hace años a España ahora ya ha obtenido la nacionalidad.

Cruz Roja prestó en 2015 ayuda a 654 niños y 438 mujeres con dificultades sociales, además de 284 personas con discapacidad y 85 reclusos en la cárcel de Villanubla. Además, hay 3.500 mayores con el servicio de teleasistencia en la provincia pero existen muchos más que reciben una ayuda a domicilio complementaria como compañía y acompañamiento al médico o al banco para realizar gestiones, que prestan los voluntarios. En ese sentido, José Ignacio de Luis confesó desconocer las estrategias de algunas empresas que operan en el tercer sector que presentan ofertas bajo coste en los concursos. “Desconozco el motivo aunque puede ser que les interese perder dinero en algunos servicios y ganar en otros”, manifestó.

La crisis económica ha cambiado las prioridades de Cruz Roja y ahora el 46 por ciento del presupuesto va destinado a la intervención social. Y eso es posible gracias a los 5,3 millones de ingresos en 2015. El 42 por ciento de ese dinero procedió de subvenciones privadas y, sobre todo, públicas. Además, las ventas y los servicios (teleasistencia y los prestados en eventos) supusieron el 15 por ciento total mientras que la captación de recursos (vía socios y campañas) significó el 41 por ciento.

De Luis concluyó que el objetivo de la ONG es lograr el equilibrio del 33,3 por ciento entre los diferentes ingresos para reducir las subvenciones y aumentar la parte de las ventas y los servicios para “tener libertad de acción” pero sin olvidar la marca de Cruz Roja.

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