El campamento inclusivo de Aspaym en el Bosque de los Sueños de Cubillos del Sil cumple 25 años
Las instalaciones de El Bosque de los Sueños en el municipio berciano de Cubillos del Sil acogen desde este martes el XXV campamento inclusivo de Aspaym, donde más de 120 niños con y sin discapacidad de Asturias, Galicia, Madrid, Navarra, Cataluña y Castilla y León se dan cita durante 12 días para disfrutar de una serie de actividades adaptadas que sirven para “reforzar su autonomía personal y su participación”, explicó la directora general del Instituto de la Juventud de Castilla y León, Estela López, que visitó las instalaciones para inaugurar el campamento. “Aquí los sueños se hacen realidad”, señaló.
Al respecto, recalcó que la Junta destinó un total de 150.000 euros para la construcción de dos de las cabañas del complejo y para distintas actividades de voluntariado. Del mismo modo, López puso en valor la “contribución solidaria” de los jóvenes voluntarios que ejercen como monitores del campamento. En nombre de la Diputación de León, la responsable de Juventud, Susana Folla, valoró que este campamento aúna inclusión y mundo rural.
En la misma línea, el alcalde de Cubillos del Sil, Antonio Cuellas, destacó que esta iniciativa viene desarrollándose en el municipio berciano desde el año 2004, a excepción del año 2020, en que la pandemia obligó a trasladarlo al ámbito virtual. “Bienvenidos a la normalidad”, señaló el alcalde, que valoró que “la familia Aspaym siga unida”. “Algunos que empezaron con cinco años aquí, hoy ya son monitores y coordinadores”, explicó Cuella, que quiso tener un recuerdo para el que fuera gerente de Aspaym, Julio Herrero, fallecido en 2018. “Su espíritu seguirá perviviendo en este campamento”, concluyó.
Por su parte, la directora general de Aspaym Castilla y León, Anabel Pérez, recordó que la cita, coordinada por la federación nacional, cuenta con 40 monitores y voluntarios, bajo la coordinación de Diego Conde y Carlos Peñalba, con Víctor Núñez como director del campamento. El equipo también cuenta con una enfermera y una auxiliar para atender a los 60 niños que participan en régimen de pernocta y a los 60 que acuden desde Cubillos y las localidades de los alrededores.
“Este campamento se diferencia de los demás en que se vive todo de una manera mucho más intensa”, explicó Diego Conde, que este año es uno de los dos coordinadores del campamento, tras cinco ediciones en las que participó como monitor. Con “ilusión y ganas” como fórmula mágica para alcanzar el éxito, el equipo pondrá en marcha un programa de actividades adaptadas variadas, como yincanas, veladas nocturnas y una jornada en el karting de Cabañas Raras.
Los pequeños también compartirán una cena popular con los vecinos del pueblo, un momento que supone “una oportunidad increíble para aprender sobre inclusión”. Más de la mitad de los participantes repiten experiencia de años anteriores, recalcó Conde, que destacó el “vínculo fuerte” que se crea entre monitores y participantes como germen de un “sentimiento de familia” para todos los implicados. “La clave es que en estos días todos podemos ser nosotros mismos, sin que se critique ni se juzgue a nadie”, concluyó.
