Quiñones defiende su conversación con Ulibarri y reitera que actuó “con la ley en la mano y absoluta limpieza”
El consejero de Fomento y Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, Juan Carlos Suárez Quiñones, ha querido explicar la conversación telefónica que mantuvo con el empresario leonés José Luis Ulibarri, en prisión provisional acusado de ser el 'cabecilla' de la trama 'Enredadera', y en la que le ofrecía la adjudicación de una carretera sin pasar por concurso y en la que se afirma 'la Administración soy yo“.
Suárez-Quiñones ha defendido su actuación y ha reiterado en un audio enviado a los medios de comunicación que actuó en pro de “los intereses públicos” y que lo hizo “con la ley en la mano y absoluta limpieza y regularidad de la actuación”. Así, mostrado su “disgusto importante porque en esta vorágine de conversaciones grabadas parece que todo vale y todo es lo mismo”.
El consejero leonés en el Ejecutivo autonómico y exjuez ha explicado que el articulo 226 de la Ley de Contratos del Sector Público prevé que toda empresa adjudicataria de una obra pública pueda ceder el contrato a un tercero en las mismas condiciones de la adjudicación y exige dos requisitos que son: la autorización del poder adjudicado, en este caso la Consejería de Fomento, y otro que la adjudicataria haya realizado al menos el 20% obra. En una empresa en conjunto se exime a la empresa de haber ejecutado ese 20% de la obra. Para Suárez-Quiñones “esto da idea del principio que late detrás de la ley: tratar de facilitar la cesión y tratar de que la obra pública no se pare”.
Por otro lado, ha precisado que la llamada la realizó porque urgía que se llevara a cabo la obra en esa carretera del Páramo leonés debido a su mal estado. “Intenté encontrar una empresa a la que pudiera interesar la cesión del contrato con un resultado negativo y en ese marco se encuentra la conversación de este consejero con una empresa con implantación en León, de un empresario leonés, y que hipotéticamente pudiera interesar serle cedido el contrato como la ley prevé”.
La carretera finalmente no se ejecutó, ha añadido Quiñones, “por falta de interés de condiciones por el empresario”. “El interés público era tratar de continuar la obra algo que no se pudo conseguir a pesar de esfuerzo de la administración con la consiguiente paralización que aún sigue”, ha reiterado.
El consejero ya había dado explicaciones en la jornada del miércoles. En declaraciones a eldiario.es explicó que el ofrecimiento se lo hizo a Ulibarri porque “es un empresario comprometido con León” y al que conoce por “asistir a sus actos” y que, además, “tampoco conoce a más empresarios”. “Ulibarri se había quejado de que casi no tenía adjudicaciones de la Consejería de Fomento, lo miramos y era verdad, acertaban poco en las licitaciones. Son concursos en los que prima la oferta económica y tienen poco margen, es la verdad”, añadió.
